TESTIGOS DEL RESUCITADO
TR
Vocación laical pascual
FUNDACIÓN:
Se funda el 8 de Diciembre de 1984, en Roma (Italia).
Fue fundada por Sabino María Palumbieri SDB a
los 50 años.
DATOS (A 1 de Enero de 2020):
500 laicos.
ORIGEN:
A finales de los años setenta del siglo xx,
deseando profundizar la Palabra para traducirla en estilo de vida, algunos
laicos encontraron una guía en el salesiano don Sabino Palumbieri. El 8 de
diciembre de 1984, las ideas dispersas tomaron forma en el Proyecto «Testigos
del Resucitado hacia el 2000», gracias a los esposos Cesira Ambrosio y Agostino
Aversa, con reuniones de reflexión antropológica y de exégesis centradas en la
Pascua.
El Grupo estaba formado, principalmente, por
familias, por lo que también se inició la experiencia del «Catecumenado de las
parejas». Nació la propuesta de un Movimiento centrado en el gozo de la
Resurrección.
PERTENENCIA A LA FAMILIA SALESIANA
Los Testigos del Resucitado fue reconocido oficialmente como grupo
de la Familia Salesiana el 25 de Marzo de 1999, por el Rector Mayor, don Juan
Vecchi.
IDENTIDAD:
El Movimiento Testigos del Resucitado (TR)
representa un itinerario de fe y de amistad compartido en los Cenáculos
—Familia de familias— que reúne juntos a jóvenes y adultos para comprender,
sentir, implementar e irradiar mejor la Pascua allí donde el Señor llama, en la
experiencia familiar, escolar, profesional, eclesial y ambiental de cada día.
En el Bautismo, sacramento pascual por
excelencia, el carisma plasma a cada cristiano que se compromete a dejarse
trabajar por el Espíritu del Resucitado. La novedad pascual del Movimiento es
una nueva forma de ser en tres niveles antropológicos: pensamiento, amor y
comportamiento. El tierrino trata de educarse a la luz de la Palabra,
para asumir una nueva cabeza y mirar al mundo con la mente del Resucitado; una nueva
forma de amar como Jesús ama; y una nueva conducta para servir a Cristo, a la
Iglesia y al prójimo, comenzando por los últimos.
Su espiritualidad está sintetizada en 2 Tim
2,8: «Acuérdate de Jesucristo, nacido del linaje de David, resucitado de
entre los muertos»; la espiritualidad se actualiza en la misión diaria de
servicio a los pobres y necesitados, en la constante formación, en la oración
diaria y en la celebración, especialmente en el tiempo entre Pascua y
Pentecostés, del Via Lucis.
El icono de los dos discípulos de Emaús es el
paradigma del camino de fe del Movimiento: el encuentro con Jesús resucitado
«en los caminos del mundo», les hace correr hacia los hermanos para llevar el
anuncio: «Hemos visto al Señor» (Jn 20,25).
PÁGINA WEB.
www.vialucis.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario